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7 pasos para que la ergonomía ocupe un lugar central en la cultura laboral

Todos queremos estar más sanos, ser más felices y más eficientes en el trabajo, y una de las formas en la que los empleadores pueden lograrlo es mediante una buena ergonomía.

Si se desea mejorar el rendimiento de la empresa en todos los ámbitos, desde la mejora de la salud y la productividad hasta la disminución de las tasas de absentismo y las lesiones relacionadas con el trabajo, es necesario hacer de la ergonomía una prioridad.

Utilizar un equipo bien diseñado es un punto de partida, pero la ergonomía eficaz debe ocupar también un lugar central en la cultura laboral.

Se crea una cultura de ergonomía cuando la comodidad y la eficacia de las personas son prioritarias en cada decisión y acción que se adopta, y cuando las prácticas de trabajo saludables son la norma.

Esto requiere que los empleadores adopten medidas preventivas, educativas y de evaluación, y que se respeten durante todo el año. Esto también pasa por que todos nosotros consideremos y fomentemos nuestro propio bienestar en nuestros espacios de trabajo.

Ese es el objetivo por el que merece la pena trabajar. El Colegio Oficial de Ergonomía británico afirma que una correcta ergonomía en la oficina puede reducir el número de problemas musculoesqueléticos en un 61 %, los días de baja de los empleados en un 88 % y la rotación de personal en un 87 %.

A continuación presentamos 7 pasos para crear una cultura del lugar de trabajo en la que la ergonomía ocupe un lugar central:

1. Planificar formación sobre ergonomía

Conocer cómo debe ser un lugar de trabajo saludable y cuáles son las prácticas de trabajo seguro es fundamental para conseguir un lugar de trabajo totalmente ergonómico.

Todo el mundo debería implicarse en esta labor. Aunque sabemos que permanecer sentados durante mucho tiempo sin un descanso no es bueno, muchos de nosotros necesitamos trabajar sentados. Por lo tanto, los empleados de todos los ámbitos deben conocer cuáles son las buenas prácticas al permanecer en esta posición.

Los talleres impartidos por fisioterapeutas o ergónomos ocupacionales ayudarán a que los trabajadores revisen su postura, comprueben la configuración de su espacio de trabajo y hablen de las mejores formas de trabajar de forma segura y cómoda.

Un profesional capacitado será el más indicado para hablar sobre las posibles consecuencias a largo plazo para la salud de una mala postura al sentarse, como el dolor de cuello y espalda, y dar consejos y sugerencias personalizadas para prevenir o reducir el impacto de las lesiones.

Una sesión de formación también puede mostrar cómo es un puesto de trabajo saludable y cómo cada elemento del equipamiento puede, y debe, ajustarse a nuestras necesidades específicas. Esta cubrirá los principales problemas posturales que podamos experimentar por estar sentados durante varias horas seguidas y ofrecerá apoyo práctico para atajar de raíz los posibles problemas de salud.

2. Fomentar una postura adecuada

Ser conscientes de nuestra postura es un factor fundamental del bienestar de los empleados. Más allá de cualquier formación, todos debemos recordar comprobar nuestra postura sentados, sentarnos de forma cómoda y ayudar a evitar lesiones, todos los días.

Entre los elementos clave para una buena postura se encuentra la posición de la espalda. Esta debe estar apoyada en el respaldo de la silla o en un respaldo dorsal, de forma que no nos inclinemos hacia adelante. Si nos inclinamos hacia adelante desde la zona lumbar para trabajar, ejercemos más presión sobre las vértebras de la columna lumbar y comprimimos los discos.

Los ojos deben estar a la altura de la parte superior de la pantalla del monitor, puesto que un ligero ángulo hacia adelante puede provocar más tensión en los músculos del cuello y de la parte superior de la espalda. Si nos inclinamos hacia adelante, el cuello y la parte posterior de la espalda deberán hacer más trabajo.

Una buena postura también implica mantener los codos a ambos lados del cuerpo. Si nos vemos forzados a mover los brazos hacia adelante para trabajar, se producirá una mayor tensión y riesgo de lesiones con el tiempo.

3. Realizar evaluaciones del lugar de trabajo

El objetivo de una evaluación de riesgos del lugar de trabajo es asegurar que trabajamos de forma segura y cómoda allá donde estemos, en la oficina o en casa en el caso del teletrabajo o del trabajo híbrido.

Si bien las organizaciones están obligadas por ley a realizar evaluaciones de riesgos del lugar de trabajo periódicas (Directiva 90/270/CEE de la UE), estas deben considerarse mucho más que meros «requisitos que cumplir». Si se realizan correctamente, permiten descubrir rápidamente los problemas y mejorar la salud y la comodidad de forma factible y práctica.

Además de las evaluaciones presenciales, una forma útil de revisar la configuración de tu puesto de trabajo es mediante la Evaluación de puestos de trabajo saludables gratuita de Fellowes.

En menos de cinco minutos, esta evaluación online gratuita te proporcionará un informe personalizado de tus prácticas y entorno laboral, y te aconsejará sobre cómo mejorar tu configuración, si fuera necesario.

4. Invertir en equipos ergonómicos

Todo lugar de trabajo bien diseñado desde el punto de vista ergonómico debe contar con equipos que favorezcan una buena postura, minimicen la necesidad de girarse o estirarse mientras se trabaja y, al mismo tiempo, sean cómodos.

Debemos ser capaces de adaptar casi cualquier elemento de un puesto de trabajo a nuestras necesidades personales, de forma que podamos trabajar más fácilmente. Algunos equipos de escritorio ergonómicos diseñados para ajustar la altura individual y la posición de sentado óptima son:

Escritorios de altura ajustable

Debemos cambiar entre las posiciones de sentado y de pie en nuestros escritorios, cuando resulte posible. Una mesa regulable en altura permite una mayor flexibilidad, lo que nos brinda la posibilidad de adaptar nuestra postura a lo largo del día.

Brazos para monitor

Cuando estés sentado o de pie en tu escritorio, la parte superior de la pantalla del monitor debe estar a la misma altura que los ojos. El brazo para monitor permite ajustar la altura de la pantalla a las necesidades individuales.

Soportes para monitor

Otra forma de aumentar la altura del monitor hasta la correcta es usar un soporte para monitor. Ofrecen varios niveles de altura, son fácilmente transportables para los trabajadores que se desplazan entre la oficina y su casa y pueden incluir un espacio de almacenamiento

Soportes para ordenadores portátiles

Es igualmente importante asegurarnos de que nuestros portátiles están a la altura correcta usando un soporte para portátil que eleve la pantalla hasta nuestra línea de visión.

Respaldos

La zona lumbar debe estar siempre bien apoyada mientras se está sentado, ya sea mediante un respaldo lumbar integrado en la silla de oficina o un respaldo que pueda fijarse a su silla.

Reposamuñecas

Para evitar el esfuerzo repetitivo y asegurarnos de que nuestras muñecas están cómodas al usar el teclado o el ratón, los reposamuñecas tienen un valor inestimable.

Reposapiés

Cuando estamos sentados, nuestras rodillas deben estar a la altura, o ligeramente por debajo, de nuestra cadera. Un reposapiés te ayudará a elevar las piernas y mantener la posición adecuada.

5. Fomentar descansos para moverse

Es fundamental animarnos los unos a los otros a tomar descansos para movernos cada cierto tiempo. Las personas que trabajan en escritorios tienen más probabilidad de tener estilos de vida sedentarios, sentados unas diez horas diarias de media, lo que acarrea riesgos negativos para la salud, incluida la obesidad y la diabetes de tipo 2.

La persona que se encuentre en un puesto de trabajo debe alternar los periodos en los que permanece sentada con breves momentos de actividad, como caminar.

Para mitigar los posibles problemas de permanecer sentado durante varias horas seguidas, el Colegio Oficial de Fisioterapeutas recomienda los siguientes ejercicios:

Estirar el pecho

  • Siéntate hacia adelante desde el respaldo de tu silla.
  • Con los pulgares apuntando hacia el techo, abre los brazos hacia los lados hasta que sientas un estiramiento en la parte delantera del pecho. Asegúrate de que los hombros están atrás y abajo.
  • Intenta activar los músculos entre los omóplatos juntándolos suavemente. No deberías sentir dolor ni hormigueo en los brazos.
  • Mantén el estiramiento durante 20 segundos y repítelo tres veces.

Estiramiento de piernas

  • Ponte de pie delante de tu escritorio y apoya tu mano izquierda sobre él para mantener el equilibrio.
  • De pie sobre la pierna izquierda, levanta el talón derecho hacia el glúteo derecho.
  • Cógete el pie derecho con la mano derecha. Deberías notar un estiramiento a lo largo de la parte delantera del muslo.
  • Mantén el estiramiento durante 20 segundos, repítelo tres veces y, a continuación, cambia de pierna.

Estiramiento sentado

  • Siéntate en el borde de tu asiento y estira tu pierna derecha hacia adelante.
  • Apoya el talón en el suelo con el pie apuntando hacia arriba.
  • Inclínate ligeramente hacia adelante desde tu cadera y mira hacia adelante. Deberías notar un estiramiento suave, pero no dolor en la parte posterior de la pierna derecha.
  • Mantén el estiramiento durante 20 segundos, repítelo tres veces y, a continuación, cambia de pierna.

6. Establecer políticas de ergonomía

Es importante hacer de la ergonomía una parte integral de la política de la empresa, ya que es un elemento reconocido de la seguridad laboral.

La Autoridad de Salud y Seguridad británica (Health and Safety Executive) destaca que tener en cuenta la ergonomía y los factores humanos puede reducir la probabilidad de un accidente y mejorar la salud y la seguridad en el lugar de trabajo.

Las mejoras del rendimiento y del bienestar que una buena ergonomía aporta a la cultura de una organización deberían formar parte de toda política de salud y seguridad. 

7. Fomentar una comunicación abierta

Promover los cambios pasa por estar en contacto con los empleados sobre los problemas ergonómicos y sus experiencias individuales. También supone preguntarles su opinión e ideas para conseguir mejoras que aporten ventajas y eviten que los problemas empeoren.

Un seguimiento regular de los comentarios, mediante encuestas, correos electrónicos o reuniones, ayudará a recopilar datos sobre el rendimiento de la empresa, la moral de los empleados y las experiencias individuales en salud y lesiones, para definir la planificación y construir una cultura de la ergonomía aún más sólida de cara al futuro.

Si deseas consejos sobre la creación de una cultura de ergonomía en tu lugar de trabajo, ponte en contacto con nuestros expertos en ergonomía, aquí:

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